Introducción
En los últimos años, la investigación sobre la microbiota intestinal y su impacto en la salud mental ha avanzado considerablemente. La psiconeuroinmunología (PNI) estudia las interacciones entre el sistema nervioso, el sistema inmune y la microbiota intestinal en el conocido eje microbiota-intestino-cerebro (encéfalo), revelando su potencial en el tratamiento de trastornos psiquiátricos como el autismo y el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH).
En este artículo, te cuento cómo diferentes cepas de probióticos pueden influir positivamente en la conducta y en las alteraciones del comportamiento asociados con estos trastornos, basándonos en la evidencia científica más reciente.
¿Qué son los probióticos?
Los probióticos son microorganismos vivos que, administrados en cantidades adecuadas, confieren un beneficio para la salud del huésped. Estas bacterias beneficiosas juegan un papel crucial en la modulación de la microbiota intestinal, la cual está estrechamente relacionada con el sistema inmunológico y el sistema nervioso.
La microbiota intestinal y su conexión con el cerebro (encéfalo)
La microbiota intestinal, compuesta por trillones de microorganismos (cuidado: son más células ajenas a tí que las propias de tu cuerpo), actúa como un órgano virtual que influye en numerosos procesos fisiológicos.
La comunicación bidireccional entre el intestino y el cerebro (encéfalo), conocida como el eje intestino-cerebro, se realiza a través de rutas neurales, endocrinas e inmunológicas. Alteraciones en la microbiota pueden contribuir a la disfunción neurológica y comportamental observada en trastornos como el autismo y el TDAH.
La microbiota intestinal y su conexión con el cerebro (encéfalo)
Autismo
El Trastorno del Espectro Autista (TEA) es una condición neurobiológica que afecta la comunicación, la conducta y la interacción social. Diversos estudios han sugerido que la administración de probióticos puede tener efectos positivos en la mejora de síntomas asociados al TEA.
Metabolismo de la glucosa y sensibilidad a la insulina
- Lactobacillus rhamnosus GG (LGG). Esta cepa ha demostrado mejorar la permeabilidad intestinal y reducir la inflamación, factores que pueden influir en el comportamiento y la cognición en niños con TEA.
- Bifidobacterium longum. Los estudios indican que esta cepa puede reducir los niveles de ansiedad y mejorar la función social en niños con TEA, probablemente debido a su capacidad para modular el eje intestino-cerebro.
- Lactobacillus plantarum. Esta cepa ha sido vinculada con la mejora de los síntomas gastrointestinales y comportamentales, siendo útil en la intervención dietética terapéutica en niños con TEA.
TDAH
El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) se caracteriza por síntomas de inatención, hiperactividad e impulsividad. Investigaciones emergentes sugieren que los probióticos pueden desempeñar un papel en la regulación de estos síntomas al influir en la microbiota intestinal.
Cepas beneficiosas para el TDAH
- Bifidobacterium breve. Esta cepa ha mostrado potencial en la reducción de los síntomas de hiperactividad e impulsividad en niños con TDAH, mejorando la atención y la conducta general.
- Lactobacillus acidophilus. Los estudios han sugerido que esta cepa puede ayudar a mejorar el equilibrio emocional y la función cognitiva en individuos con TDAH, contribuyendo a una mejor gestión del comportamiento.
- Bifidobacterium lactis. Esta cepa es conocida por su capacidad para mejorar la salud intestinal y, a su vez, influir positivamente en el estado de ánimo y la concentración en niños con TDAH.
Mecanismos de acción de los probióticos
Modulación del sistema inmune
Los probióticos pueden influir en la respuesta inmune al reducir la inflamación sistémica, un factor común en trastornos neuropsiquiátricos. Al regular la producción de citoquinas y otros mediadores inflamatorios, los probióticos pueden ayudar a restaurar el equilibrio inmunológico y mejorar los síntomas conductuales.
Producción de metabolitos beneficiosos
Las bacterias probióticas producen diversos metabolitos, como ácidos grasos de cadena corta (AGCC), que tienen efectos neuroactivos. El propionato, un AGCC producido por ciertas cepas de probióticos, ha demostrado tener efectos beneficiosos en la función cognitiva y el comportamiento. Puedes leer más acerca de este ácido graso de cadena corta en el siguiente enlace: https://psiconeuroinmunologiaonline.com/salud-intestinal/propionato-microbiota-intestinal-beneficios/
Efectos sobre el eje intestino-cerebro
Los probióticos pueden influir en la comunicación entre el intestino y el cerebro mediante la producción de neurotransmisores y la modulación de la actividad del nervio vago. Estos efectos pueden resultar en mejoras en el estado de ánimo, la conducta y la función cognitiva en individuos con TEA y TDAH.
Evidencia científica y estudios recientes
Autismo
Un estudio publicado en la revista Journal of Autism and Developmental Disorders encontró que la administración de una combinación de Lactobacillus rhamnosus y Bifidobacterium longum mejoró significativamente los síntomas gastrointestinales y conductuales en niños con TEA.
TDAH
Investigaciones recientes han mostrado que la suplementación con Bifidobacterium breve puede reducir los síntomas de hiperactividad e impulsividad en niños con TDAH. Estos efectos se atribuyen a la capacidad de esta cepa para modular el microbioma intestinal y reducir la inflamación sistémica.
Conclusión
La evidencia científica sugiere que los probióticos pueden desempeñar un papel crucial en el tratamiento de trastornos como el autismo y el TDAH mediante la modulación de la microbiota intestinal y sus interacciones con el sistema inmune y el cerebro (encéfalo).
Cepas específicas como Lactobacillus rhamnosus, Bifidobacterium longum y Lactobacillus plantarum han mostrado beneficios prometedores en la mejora de síntomas conductuales y cognitivos.
Como terapeuta PNI, es fundamental considerar la integración de los probióticos como parte de un enfoque terapéutico integral, holístico, individualizado, riguroso y basado en la evidencia científica para mejorar la calidad de vida de las personas con autismo y TDAH.
Recuerda que puedes reservar tu cita para PNI online a través del enlace del borde superior y también buscar los probióticos específicos en el siguiente portal si, por cualquier motivo, no los tienen en tu tienda ecológica, farmacia o herbolario de confianza. ¡Un fortísimo abrazo!